Las ciudades y espacios que habitamos reflejan un profundo deseo de estética y funcionalidad, pero, en el contexto actual, también llevan el peso de salvaguardar a sus habitantes. A medida que las dinámicas urbanas se transforman, surge la necesidad de construir entornos que no solo sean visualmente atractivos, sino también resilientes ante potenciales amenazas.
El desafío radica en equilibrar la belleza del diseño con las demandas de un mundo en constante cambio, donde los riesgos y amenazas evolucionan. Los arquitectos y urbanistas se enfrentan ahora al reto de reinventar espacios que inspiren y protejan al mismo tiempo. El arte y la ciencia de la arquitectura, combinado con la primordial necesidad de seguridad, se convierte en un diálogo esencial para el futuro de nuestras comunidades.
En Security Forum 2023, la Asociación Directivos Seguridad Integral (ADSI) presentó el Panel «La seguridad por diseño en el marco de la regeneración urbana. Rol del Director de Seguridad», donde distintas voces proporcionaron perspectivas enriquecedoras sobre este complejo equilibrio.
En la mesa redonda moderada por Eduard Zamora Peral, Presidente de Security Forum y Presidente de ADSI, intervinieron: José Miguel Ángel Olleros, experto en Seguridad por Diseño y Prevención del Delito; Anna Almécija Casanova, Criminóloga, Jurista y Vicepresidenta de la Asociación Catalana para la Prevención de la Inseguridad a través del Diseño Ambiental (ACPIDA); Lluís Corbella i Jordi, Arquitecto y Fundador del estudio COMA Arquitectura.
Diseño y Seguridad
«Partimos de la premisa que, cuando la seguridad no se diseña en origen, el delincuente anida en un espacio y encuentra su oportunidad», aclaró José Miguel Ángel Olleros en su ponencia. El experto subrayó la necesidad de minimizar las oportunidades para actos delictivos de manera intuitiva y sostenible. «La arquitectura y diseño de los edificios juegan un papel crucial», afirmó, «ya que pueden prevenir la intrusión de delincuentes».
Como experto en Seguridad por Diseño, presentó un ejemplo de un espacio público que combina visibilidad a través de vigilancia natural, organización espacial y una iluminación adecuada. «Nuestro propósito final es salvaguardar la salud mental, resguardar el patrimonio, preservar el estilo de vida y fomentar la cohesión y actividad en la comunidad», destacó Olleros.
¿Y qué herramientas tenemos para garantizar la seguridad por diseño? Olleros presentó diferentes recursos, incluyendo el marco legal y las normas de prevención del delito a través del diseño ambiental o de infraestructuras, con un enfoque más tecnológico.
Perspectiva de la Criminología Ambiental
«La Criminología Ambiental se centra en entender cómo los elementos espaciales influyen en la ocurrencia de delitos», expresó Anna Almécija en su presentación. La Presidenta de ACPIDA destacó que hay áreas donde los delitos tienden a concentrarse y, al analizar estos lugares, los criminólogos descubren que su susceptibilidad suele estar ligada a su diseño. La investigación nos muestra qué características de dichos espacios los hacen propensos a ser escenarios delictivos.
A lo largo de su ponencia, Almécija presentó ejemplos concretos de zonas que incorporan control natural de accesos, fortalecimiento territorial, participación activa de la comunidad y enfoques sostenibles. Recalcó que todos jugamos un papel vital en garantizar la seguridad de un lugar.
«Cuando nos sentimos conectados y consideramos un espacio como propio, tendemos a cuidarlo más y a estar alertas. Si percibimos actitudes antisociales, actuamos. Pero si nos sentimos desvinculados, esa desconexión puede comprometer la seguridad del entorno», reflexionó la experta.
Enfoque de los arquitectos
Luis Corbella, fundador del estudio de COMA Arquitectura, ilustró cómo la arquitectura moderna y la seguridad pueden fusionarse para crear espacios no solo funcionales sino también estéticamente atractivos. Puso de relieve el proyecto del Liceo Francés de Barcelona, un testimonio palpable de esta integración. «Este proyecto fue concebido desde sus cimientos en colaboración estrecha con los expertos en seguridad, en este caso representantes del Estado francés», explicó Corbella.
Para los profesionales de la arquitectura, el desafío no es menor: ¿cómo se puede inyectar seguridad en un espacio sin que su esencia o estética se vea comprometida? ¿Cómo se evita que un edificio dé la sensación de ser una fortaleza inaccesible? En el Liceo Francés, este dilema se abordó magistralmente. A través de la implementación de elementos arquitectónicos innovadores que dirigían y controlaban el flujo de personas y vehículos, y complementando con áreas abiertas como un teatro al aire libre, el proyecto demuestra que es completamente viable encontrar un punto medio donde la seguridad y la belleza arquitectónica coexisten en armonía.
Importancia de la colaboración multidisciplinaria
En el marco del Panel de ADSI, la discusión dejó claro que una colaboración estrecha entre diferentes disciplinas es crucial para lograr un diseño verdaderamente seguro y atractivo. No es suficiente con tener un buen diseño arquitectónico; también es necesario contar con la perspectiva de expertos en seguridad, sociólogos y la propia comunidad.
Más allá de los arquitectos y urbanistas, hay otro profesional cuya función es crucial: el experto en prevención del delito. Si bien su papel no siempre es reconocido, su trabajo es esencial para crear diseños urbanos y arquitectónicos seguros. Estos expertos entienden las tendencias delictivas y pueden anticipar puntos vulnerables en un diseño. «Es imprescindible la figura del director de seguridad o del experto en prevención del delito para que pueda dar juntos las indicaciones correspondientes para poder diseñar», señaló Almécija aclarando la necesidad que «trabajen codo con codo con otros profesionales».
La verdadera innovación radica en cómo se pueden integrar medidas de seguridad sin sacrificar la belleza y funcionalidad de un espacio. A través de la colaboración y la consideración cuidadosa de múltiples perspectivas, es posible crear espacios que no solo protejan a los ciudadanos, sino que también fomenten una sensación de comunidad y pertenencia.
