«En Sanitas trabajamos para garantizar el mayor bienestar a nuestros clientes y pacientes, por lo que garantizar su seguridad e integridad en cada área es fundamental». Así lo asegura Santiago Riaño, responsable de Seguridad de Sanitas y Bupa ELA, en esta entrevista con Cuadernos de Seguridad, donde además hace hincapié en la importancia de la formación a los empleados para hacer frente a los riesgos derivados de la propia actividad de un hospital.
— Para comenzar, ¿cómo está estructurado el departamento de Seguridad de Sanitas? ¿Cuál es el área de actuación del departamento en cuanto a hospitales y otros centros sanitarios?
El departamento de Seguridad está estructurado para dar cobertura a todas las unidades de negocio (seguros, hospitales, dental y residencias de mayores) en los más de trescientos inmuebles en los que desarrollamos nuestra actividad. Del mismo modo, damos soporte a los negocios de la unidad de mercado de Bupa, matriz de Sanitas, en el resto de Europa y Latinoamérica, que se coordinan desde España.
Operativamente, desde la sede de Ribera del Loira, en Madrid, se lleva a cabo el control del resto de centros; estamos en continua comunicación con todos los equipos que allí trabajan para lograr los mejores resultados.
— ¿Cuáles considera que son las claves actuales para garantizar la seguridad y protección en la red de centros de Sanitas, tanto a trabajadores como a usuarios?
Con el fin de garantizar la máxima seguridad del equipo, comenzamos elaborando unos Security Risk Assessments (SRA) para cada uno de nuestros centros, con independencia de su ubicación, dimensión o el uso al que está destinado. Según este análisis, implementamos diversas soluciones que se aplican en función de las necesidades de cada espacio. Entre ellas contamos con la instalación de alarma conectada a una Central Receptora de Alarmas (CRA), en nuestro caso trabajamos con Movistar Prosegur Alarmas, donde monitorizan periódicamente el buen funcionamiento de la central y los elementos a ella conectados, así como los saltos de alarma que se puedan producir. De darse esta situación se procede según el protocolo establecido, que pasa por llamar a la dirección del centro, vigilante itinerante o, en caso necesario, se activa llamada a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
También contamos con un sistema de CCTV (Circuito Cerrado de Televisión) a través de cámaras instaladas en los diferentes inmuebles y que nos permiten recoger grabaciones sobre los posibles incidentes. Por otro lado, el control de accesos nos permite identificar las personas que pueden o no acceder a determinados lugares, como áreas de descanso, CPD’s o la propia instalación.
— ¿Cuáles son los grandes retos a los que tiene que hacer frente hoy en día el sector de la Seguridad en hospitales y centros sanitarios?
Los retos en materia de seguridad no han cambiado mucho en los últimos años. Nuestros centros, especialmente los centros médicos y hospitales, son espacios abiertos en los que hay un constante flujo de personas que van a recibir asistencia, y los profesionales que allí trabajan centran el 100% de su atención en ese cuidado.
Se trata de lugares, por tanto, en los que tendemos a mostrarnos más relajados en cuanto al cuidado de nuestras propias pertenencias, momento que muchos delincuentes aprovechan. Es ahí donde debemos poner más el foco en nuestro trabajo. En Sanitas trabajamos para garantizar el mayor bienestar a nuestros clientes y pacientes, por lo que garantizar su seguridad e integridad en cada área es fundamental.
Por otro lado, cabe destacar el aumento generalizado de agresiones, físicas y verbales, al personal médico y sanitario que se ha experimentado en los últimos años y que es especialmente preocupante en todo el sector. Como expertos en seguridad debemos poner especial cuidado en proteger también a nuestros empleados.
