Desde que en 2019 se implementase el Real Decreto-Ley 8/2019 y el punto 34.9 del Estatuto de Trabajadores en España, el control horario de la entrada y salida de los trabajadores se ha vuelto un requisito legal indispensable. Sin embargo, muchas empresas aún enfrentan desafíos significativos en este aspecto.
Aún falta camino por delante en el control horario
Según datos recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE) e Inspección del Trabajo, en los últimos tres años se han detectado 3.299 infracciones en materia de registro de jornada. Este panorama destaca la relevancia de la gestión eficaz del tiempo laboral, no solo para cumplir con la ley, sino también para proteger los derechos de los trabajadores y los intereses de la empresa.
Las empresas que no implementan un sistema adecuado de control horario se exponen a sanciones económicas que varían entre los 60€ y los 6.250€. Además, como señala Marcelo Dos Reis, CEO del Grupo SPEC, la falta de un registro preciso puede llevar a situaciones en las que los trabajadores realicen horas extras sin remuneración adecuada.
¿Y si un trabajador se niega al registro horario?
Si un trabajador se niega a fichar, a pesar de que la empresa proporcione los medios necesarios, esto puede considerarse un incumplimiento laboral, con sanciones que podrían incluir desde una suspensión temporal hasta un despido.
Una estrategia efectiva para enfrentar la resistencia al fichaje es la comunicación clara y transparente con los empleados. Es fundamental explicar que el control horario beneficia a todos, asegurando un registro exacto de las horas trabajadas y facilitando la reclamación de horas extras cuando corresponda. Además, elegir un sistema de fichaje que sea cómodo y cumpla con el Reglamento Europeo de Protección de Datos.
