A raíz de la pandemia COVID-19 la vida social, cultural y escolar se trasladó a la red trayendo consigo un aumento significativo del tiempo de uso de internet en niños. Paralelamente y como consecuencia los riesgos cibernéticos y las desigualdades digitales también aumentaron, así lo confirmó en 2021 la Comisión Europea en el documento EU strategy on the rights of child.
En este mismo documento se afirma que desde una muy temprana edad los niños juegan, crean, aprenden, interactúan y se expresan en un entorno en línea y conectado. Por ende, están mejor situados para prosperar en sistemas educativos y mercados laborales más digitalizados y conectados de cara a un futuro. Además, la Comisión Europea resalta la importancia del uso de las herramientas digitales que pueden servir de ayuda a los niños con discapacidades para poder ejercer actividades como el aprendizaje, la comunicación y la participación en actividades recreativas online, siempre y cuando sean accesibles.
Ahora bien, en un escenario rodeado de las nuevas tecnologías es imprescindible establecer una serie de normas y regulaciones cuya finalidad sea la de proteger a los niños y educar a los padres sobre el uso apropiado de las TIC’s.
Regulaciones sobre el uso de internet en niños
Desde el 2012 la European strategy for a better internet for children también conocida como (BIK) ha protegido la actividad de los niños en línea mediante la financiación, coordinación y autorregulación. Años más tarde la Estrategia general de la Comisión sobre los derechos del niño («RoC Strategy») anunció la actualización de la Estrategia BIK con el objetivo de maximizar las oportunidades de la transformación digital para el aprendizaje, la socialización, la creatividad y el disfrute, al tiempo que se mitigan los riesgos en línea.
En mayo del pasado año y en consonancia con los Principios Digitales Europeos se acogió la nueva estrategia BIK+. “Nuestra visión es de servicios digitales apropiados para la edad, con todos los niños en Europa protegidos, empoderados y respetados en línea, y nadie se queda atrás”, destaca la Comisión Europea.
Los tres pilares fundamentales de BIK+
- Experiencias digitales seguras para proteger a los niños de contenidos, conductas, contactos y riesgos nocivos e ilegales como consumidores jóvenes y mejorar su bienestar en línea a través de un entorno digital seguro y adecuado para la edad, creado de manera que respete el interés superior de los niños.
- Empoderamiento digital para que todos los niños, también los que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, adquieran las habilidades y competencias necesarias para tomar decisiones acertadas y expresarse en el entorno en línea de manera segura y responsable.
- Participación activa, respetando a los niños dándoles voz en el entorno digital, con más actividades dirigidas por niños para fomentar experiencias digitales seguras innovadoras y creativas.
Esta nueva estrategia está basada en un proceso de consulta a los niños y los padres así como a los profesores, Estados miembros, los medios de comunicación, la industria de las TIC, la sociedad civil, el ámbito académico y las organizaciones internacionales. Su objetivo principal es el de complementar y apoyar la aplicación de las medidas existentes para la protección de los niños en línea, además de ayudar al desarrollo de sus aptitudes y capacidad para un disfrute seguro en línea.
Uso de internet en niños y jóvenes españoles
El Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ontsi) afirma que un 98% de los menores entre los 10 y 15 años hace uso de internet de forma habitual desde la pandemia. El porcentaje de niños y niñas que emplean el ordenador pasó del 90 al 95% mientras que 7 de cada 10 tienen teléfono móvil.
Los datos muestran que, en las familias con una renta inferior a los 900 euros, el 92% de los menores tienen acceso a internet, mientras que en las familias con rentas superiores a los 2500 euros el uso de internet en niños asciende a un 98%.
Teniendo en cuenta estos datos y el elevado porcentaje de los menores que cuentan con acceso a internet, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) junto a UNICEF ofrecen una guía orientada a las madres y padres para aplicar pautas relacionadas con el buen uso de internet en niños. Además, el Ayuntamiento de Madrid también ofrece una guía ilustrativa en esta materia.
