José Carlos Vázquez Souto. Director de Seguridad. Unicredit S.p.A Sucursal en España. Vicepresidente de la Asociación Foro Efitec.
En Occidente nos hemos acostumbrado, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, a un largo periodo de estabilidad social y crecimiento, no exento de las correspondientes tensiones consecuencia de las variaciones en los ciclos económicos. Pero una crisis en la que se combina la sanidad y la economía (la segunda consecuencia de la primera) no se producía desde la Primera Guerra Mundial.
Desde los inicios de la década de los 90 hemos ido recibiendo señales de alerta sobre la probabilidad de que una crisis sanitaria localizada en un punto del planeta pudiera tener consecuencias en otros lugares. Solo como recordatorio mencionaremos las Vacas Locas, Sars 2000, Gripe Aviar o Ébola en 2014.
Estas amenazas supusieron el desarrollo de los Planes de Contingencia, que evolucionaron de un concepto puramente informático a uno holístico que cubre la totalidad del Negocio. La evolución ha sido paralela al desarrollo de las tecnologías y sobre todo a las TIC, que han soportado una cantidad ingente de tráfico con un nivel de calidad muy alto. Pues bien, podemos decir que la pandemia de la COVID19 ha sido la prueba en real para todos los planes que las empresas tenían establecidos.
Las entidades financieras han evidenciado ser capaces de mantener los servicios demandados por los clientes de una manera «casi normal» y seguir manteniendo el foco en sus necesidades. Esto no se consigue sin preparación, capacidad de adaptación y profesionalidad.
Esta respuesta es el fruto de las medidas de control aplicadas a los riesgos, que previamente estaban identificados y analizados, y asegurando unos niveles de idoneidad y eficacia adecuadas para su mitigación.
Como ya se ha comentado, no ha habido improvisación, sino adaptación a las necesidades, que en algunas ocasiones eran cambiantes al tiempo que iba evolucionando la pandemia. Pero a pesar de ello, siempre nos vamos a encontrar ante situaciones que van a tensionar el modelo y que van a requerir una intervención rápida, no exenta de estrés.
La actuación de los departamentos de Seguridad ha dependido de la tipología de cada entidad, sin embargo, en todos se han dado una serie de actuaciones comunes:
Coordinación con los departamentos clave de la organización (RRHH, PRL, Servicio Médico, Continuidad del Negocio, Inmuebles, Compras, etc.) Todos ellos debidamente coordinados por la Dirección de la Entidad.
Para acceder al artículo completo pincha aquí