El Black Friday sigue ganando popularidad y esto provoca que cada vez más los consumidores online sean más propensos a convertirse en víctimas de ciberataques. Este año, el número de ataques al comercio electrónico aumenta un 15% durante el Black Friday respecto al año anterior.
Un nuevo informe de Kaspersky destaca el creciente peligro para los consumidores durante estos días de compra en los que la probabilidad de sufrir un ataque de phishing financiero aumenta un 24% en comparación con la media del resto del año.
El Black Friday se ha convertido en el mayor evento de consumo del año, el 95% de los compradores son conscientes de ello. Sin embargo, la tendencia de los usuarios se ha visto modificada, ya que en el pasado los consumidores acudían a los comercios físicos durante el Black Friday y a los sitios online durante el Cyber Monday, estrenado en el año 2005. Las cifras globales del Black Friday actuales revelan que solamente el 12% de los consumidores hicieron sus compras única y exclusivamente en las tiendas físicas.
El constante incremento de las aplicaciones de los comercios online y el prematuro acceso a las ofertas desde la comodidad del hogar han propiciado que los usuarios se decanten por el comercio electrónico. De hecho, un 56% de los consumidores prefiere comprar online a comprar físicamente y el 55% usa sus teléfonos móviles para realizar las transacciones durante el fin de semana del Black Friday. Este incremento en el número de compras online, sumado a la mayor duración del periodo de descuentos y promociones, generan una ventana más amplia para los ciberataques.
Según los expertos de Kaspersky, durante los nueve primeros meses de 2019, los usuarios de algunas de las marcas más populares fueron atacados con al menos quince familias distintas de malware financiero. Este año, además de las conocidas familias de malware financiero Zeus, Betabot o Cridex Gozi, Kaspersky ha identificado también otras dos nuevas: Anubis y Gustuff.
Los ciberdelincuentes se dirigen a las marcas de comercio online para conseguir las credenciales de los usuarios, como logins, contraseñas, números de tarjeta, teléfono etc. Capturan los datos de la víctima tras interceptar los registros de entrada en la página web, modificando el contenido del sitio y redirigiendo a los usuarios a otras páginas web de phishing. Por ello, los usuarios han de prestar mayor atención si cabe y las plataformas de comercio electrónico han de ayudar a mantener la seguridad de sus clientes.
Consejos para el consumidor:
- Invierte en una solución de ciberseguridad para proteger todos los dispositivos que utilizas para comprar online.
- Haz copias de seguridad de tus datos regularmente para evitar que tus archivos personales se pierdan en caso de que seas objeto de un ciberataque.
- Utiliza contraseñas únicas para cada cuenta online. Si te resulta demasiado complicado, utiliza un gestor de contraseñas.
Consejos para las marcas y comercios online:
- Utiliza un servicio de pago de buena reputación y mantén actualizado el software de tu plataforma de pago online. Cada nueva actualización puede contener parches críticos para que el sistema sea menos vulnerable a los ciberdelincuentes.
- Utiliza una solución de TI y de ciberseguridad para proteger tu negocio y a tus clientes.
- Presta atención a la información personal utilizada por tus clientes. Utiliza una solución de prevención de fraudes que se adapte al perfil de tu empresa y al de tus clientes.