Javier Villarrubia, Responsable Nacional de Operaciones Retail de Securitas Seguridad España
El crecimiento imparable del e-commerce puede llevarnos a pensar que las compras físicas tienen un futuro incierto. Pero la realidad es que, al menos en nuestro país, los ciudadanos están decidiendo volver a la fórmula de compra tradicional. De hecho, esta vuelta a las tiendas físicas ha quitado a las compras online una parte importante de la cuota que consiguió en 2020, y la afluencia de los principales centros y calles comerciales de las ciudades españolas también está experimentando importantes crecimientos.
En esta «recuperación» del sector retail, como en casi todo lo que está ocurriendo en la era pospandemia, juegan un papel principal la tecnología y la digitalización del mundo físico. Dos fenómenos que se reflejan también en la seguridad de este sector, que vuelve a enfrentar el resurgir de riesgos ya conocidos, y algunos otros nuevos, pero que puede contar ahora con soluciones innovadoras que están revolucionando la manera de minimizar esos riesgos mediante la información, la prevención y la optimización.
El punto de partida para muchas de estas soluciones es la digitalización de los servicios de seguridad. Algo que, a día de hoy, más que una tendencia debería ser ya una realidad asentada, pero que desgraciadamente no constituye la norma en el sector. Nuestra experiencia es que dotar a los equipos operativos de herramientas digitales aumenta exponencialmente su capacidad y la utilidad de su labor para los clientes, más aún cuando estas herramientas se personalizan teniendo en cuenta las casuísticas particulares del sector retail, dando lugar a soluciones más versátiles, interactivas y adaptadas a las nuevas plataformas digitales de Business Intelligence.
Poder digitalizar cualquier tipo de incidencia con unos pocos toques en un dispositivo móvil no solo facilita la labor del personal de seguridad, sino que abre todo un mundo de posibilidades al operador del establecimiento, que obtiene al momento informes personalizados sobre los que apoyar su toma de decisiones locales, no solo para mejorar la protección sino también otros aspectos de su negocio.
La digitalización, trasladada al ámbito más global de una cadena de tiendas o una gestora de centros comerciales, produce una ingente cantidad de datos recogidos por personas y sistemas que abren la puerta al sueño de cualquier responsable de Seguridad: la predicción de los riesgos que permita anticiparse a ellos.
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