Los ciberataques se están convirtiendo en uno de los principales riesgos para las empresas. El ransomware es un problema que afecta cada año a miles de entidades en todo el mundo, como se evidenció hace unos días en la segunda Cumbre de la Casa Blanca, que reunió a líderes de 36 países, 13 empresas y organizaciones.
El mes de noviembre ha sido clave para la consolidación de dos de las más importantes normativas, con aprobación prevista en 2023: la Directiva NIS2 y el reglamento DORA. El amparo de la normativa sobre ciberseguridad subraya, por tanto, una necesidad legal debida al crecimiento exponencial de los ciberataques en toda Europa.
Teniendo en cuenta la frecuencia de los ataques y los problemas ocasionados en todo el mundo, cada día más se hace necesario incluir un sistema ciberseguro dentro de las medidas de seguridad de cada empresa.
En este marco se encuentra la iniciativa formativa de ACAES, que celebró el 10 de noviembre la jornada “Ciberseguridad: oportunidad de negocio para las empresas de seguridad privada”.
La ciberseguridad, una necesidad imprescindible
A cargo de Alfonso Bilbao, presidente de AEINSE, la jornada sobre Ciberseguridad ofreció un momento de reflexión necesario sobre la implantación de un plan de acción empresarial que incluya un sistema ciberseguro.
Esta segunda sesión de jornadas formativas de la Asociación catalana se organizó con la finalidad de “concienciar y formar a las empresas de seguridad privada” para hacer frente a la “transformación digital”. Durante el encuentro se subrayó la urgencia de instalar un sistema de seguridad eficaz, hablando también de la necesidad de conocer los posibles riesgos y las nuevas soluciones tecnológicas.
La ciberseguridad como oportunidad de negocio
En la jornada formativa de AEINSE se habló de las oportunidades de negocio para las empresas instaladoras. Hace pocos años, dichas empresas instalaban un sistema de seguridad, que simplemente tenía que responder a un buen análisis de riesgos y a los mantenimientos correspondientes. Hoy en día es necesaria una formación constante para conocer todas las posibles amenazas, en una profesionalización técnica que diferencia positivamente la empresa dentro del nicho económico de la ciberseguridad.
