Más negocio pero en menos manos. A pesar de que el sector de la seguridad privada creció en 2017 por encima de las expectativas, el número de compañías anotadas en el Registro Central de Empresas de Seguridad o en los registros catalán y vasco se redujo en un 10,5%. Así, 2017 se cerró con 1.391 inscripciones, 163 menos que en 2016, año en el que se produjo un tímido repunte del 0,71% respecto al ejercicio anterior con once empresas más, según los datos del Ministerio del Interior.
Esta tendencia a la concentración del sector también se ve confirmada por los datos de creación de empresas, ya que en 2017 se dieron de alta 80 compañías, por las 86 de un año antes. Este dato, si bien no supone un retroceso significativo, sí evidencia una senda descendente a largo plazo, pues en 2015 se crearon 86 y en 2014 la cifra alcanzó las 114.
Asimismo, en 2017 se dieron de baja en el Registro central y en los autonómicos un total de 69 empresas de seguridad, el mismo número que en 2016 y 14 menos que las computadas un año antes.
Por ámbito de actividad, la mayor concentración de negocio se registra en el subsector de instalación y mantenimiento, con 1.228 compañías, 132 más que en el ejercicio anterior, seguidas a mucha distancia por las de vigilancia y protección, con 469, 80 más que en 2016. El podio lo completan las centrales receptoras de alarmas, con 155, nueve por encima de las consignadas en 2016.
Desde el Ministerio se puntualiza que los datos por tipo de actividad hacen referencia al número total de actividades habilitadas, lo que significa que hay empresas que desarrollan más de una, por lo que la suma de todas ellas supera el número total de compañías inscritas en el Registro.