Enrique Hormigo, presidente de la Asociación Profesional de Detectives Privados de España (APDPE), expone en esta entrevista exclusiva con CUADERNOS DE SEGURIDAD, sus planes al frente de la entidad y los retos que afronta una profesión que arrastra muchos prejuicios y sigue siendo una gran desconocida para la mayor parte de la sociedad.
—¿Qué objetivos se ha marcado tras su nombramiento como presidente de la Asociación Profesional de Detectives Privados de España?
—El primero y más importante es intentar unificar a la profesión, pues no hay duda que caminando todos juntos es mucho más fácil conseguir otros objetivos también muy importantes, que es minimizar en la medida de lo posible los efectos adversos de la Ley de Seguridad Privada por la que nos regimos. No hay que olvidar que el desarrollo reglamentario de esa Ley se puede prever a raíz de los dos borradores que circulan por ahí, el primero de 2015 y el último de este año. Tenemos que trabajar todos juntos para evitar que ese Reglamento acabe con buena parte del sector de la investigación privada.
Por otro lado, la lucha contra el intrusismo es otro punto al que le estamos dando mucha importancia, pues esta conducta no sólo perjudica gravemente al profesional sino también al ciudadano, que deposita su confianza en alguien al que cree un profesional sin serlo.
—¿Cuáles son los pilares sobre los que asentará su mandato en la APDPE?
—La transparencia es uno de esos pilares básicos, también la empatía para ponerte en el lugar de quien tienes enfrente, un mandato compartido y democrático donde la opinión de todos es muy importante, al igual que la deliberación; quitar en gran medida el espíritu presidencialista que suele regir en las asociaciones profesionales y convertirlo en un espíritu participativo. Intentar dar un servicio al asociado a un menor coste, e intentar atraer al que todavía no se ha asociado
—¿Cuáles serán las acciones y proyectos inmediatos a desarrollar por la APDPE?
—Bueno…, es de lo que ya estoy hablando en cuanto a la unificación de la profesión y poder fijar contactos con otras asociaciones y colegios para crear protocolos de actuaciones comunes en relación a la legislación que nos regula. También está la lucha contra el intrusismo, y en este sentido hemos mantenido reuniones no sólo con Seguridad Privada, sino también con la comisión de interior del PSOE, y hemos solicitado igualmente reuniones con el resto de los partidos políticos con representación parlamentaria.
—¿Qué objetivos se ha marcado tras su nombramiento como presidente de la Asociación Profesional de Detectives Privados de España?
—El primero y más importante es intentar unificar a la profesión, pues no hay duda que caminando todos juntos es mucho más fácil conseguir otros objetivos también muy importantes, que es minimizar en la medida de lo posible los efectos adversos de la Ley de Seguridad Privada por la que nos regimos. No hay que olvidar que el desarrollo reglamentario de esa Ley se puede prever a raíz de los dos borradores que circulan por ahí, el primero de 2015 y el último de este año. Tenemos que trabajar todos juntos para evitar que ese Reglamento acabe con buena parte del sector de la investigación privada.
Por otro lado, la lucha contra el intrusismo es otro punto al que le estamos dando mucha importancia, pues esta conducta no sólo perjudica gravemente al profesional sino también al ciudadano, que deposita su confianza en alguien al que cree un profesional sin serlo.
Lea la entrevista íntegra en CUADERNOS DE SEGURIDAD.
