Isabel Maestre, directora de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), analiza para CUADERNOS DE SEGURIDAD el nuevo marco legal que determinará la evolución del sector de los drones, al mismo tiempo que aboga por fomentar la profesionalización de una actividad cuya aplicación al mercado de la Seguridad está comenzando a definirse.
[La entrevista íntegra puede leerse en el número 318 de enero de CUADERNOS DE SEGURIDAD]
—¿En qué momento se encuentra el nuevo marco normativo que regulará la actividad de los drones los próximos años?
—El pasado 22 de noviembre finalizó el plazo de Información Pública del proyecto de Real Decreto por el que se regula la utilización civil de las aeronaves pilotadas por control remoto, y se modifica el Real Decreto 552/2014, de 27 de junio, por el que se desarrolla el Reglamento del aire y disposiciones operativas comunes para los servicios y procedimientos de navegación aérea y se modifica el Real Decreto 57/2002, de 18 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Circulación Aérea. Ahora mismo se están analizando las observaciones y comentarios que se han realizado.
—La Comisión de Transporte del Parlamento Europeo respaldó recientemente las nuevas normas que ha propuesto la Comisión Europea para garantizar la seguridad y privacidad en la UE en relación al uso de drones, ¿de qué manera afectará al marco regulador en nuestro país?
—Toda la legislación en materia de seguridad aérea debe ser lo más homogénea posible a nivel internacional. Existen ya foros donde se trata de la homogenización normativa y de nuevas propuestas del sector, como OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) o JARUS (Joint Authorities for Rulemaking on Unmanned Systems), en los que España está presente.
En función del formato que adopte la futura legislación a nivel europeo, reglamento o directiva, España en principio poco tendría que legislar al respecto, una vez que hemos participado en su elaboración junto con otros países que al igual que nosotros ya tienen norma, aunque dependerá de la versión final de la norma.
—Las limitaciones de la Ley actual, aprobada en 2014, impiden el despegue de una industria, en la que se incluye el sector de la Seguridad Privada, ¿podría adelantarnos algunos aspectos que recogerá la nueva legislación?
—El nuevo Real Decreto establece nuevos escenarios operacionales, tal como demanda el sector.
Los principales escenarios que se contemplan son:
– El sobrevuelo de zonas urbanas y aglomeraciones de personas, siempre que sea con un dron de menos de 10 kilos, a un máximo de 100 metros del piloto y de 120 metros de altura. Además, es necesario presentar un estudio de seguridad específico para cada tipo de operación y la autorización de AESA para la misma.
-Las operaciones nocturnas y los vuelos más allá del alcance visual del piloto con aeronaves de entre 2 y 25 kilos, en ambos casos es necesario un estudio de seguridad, la autorización de la Agencia y que el aparato tenga unos requisitos técnicos para cada caso.
-La norma también contempla la evolución tecnológica por lo que prevé que cuando la tecnología lo permita se puedan realizar operaciones en espacio aéreo controlado, aunque en este caso, se requerirán requisitos de formación del personal y de los equipos, así como un estudio aeronáutico de seguridad coordinado con el proveedor de servicios de tránsito aéreo y la previa autorización de AESA.
—¿Podría ofrecernos datos actuales del sector de los RPA´s -número de operadores habilitados, escuelas autorizadas ATOS,…?
—Más de 1.800 operadores habilitados en AESA.
-Más de 2.500 aeronaves registradas.
-Más de 2.700 pilotos registrados en AESA.
-Autorizados más de 1.000 vuelos de prueba demostración o investigación.
-72 Escuelas ATOS que imparten cursos de piloto de drones.
-89 organismos entre operadores y fabricantes que imparten formación práctica.