Considerando la semi-obsolescencia de los equipos analógicos tradicionales de videovigilancia, cuando un usuario decide actualizar su solución a un sistema moderno se le plantean dos opciones, la tecnología IP o el vídeo analógico en alta definición (HDTVI). Permitiendo ambas alcanzar resoluciones MegaPixel, la solución HDTVI está adquiriendo gran popularidad gracias a su sencillez de instalación y adaptación, al poder utilizar el mismo cableado y canalización ya existente en una instalación analógica.
Con tales opciones, muchos son los usuarios considerando que, una mejora en la calidad de imagen, nuevas funcionalidades inteligentes, menor consumo de almacenamiento o una mayor percepción de los detalles, son razones más que suficientes para realizar el cambio a las nuevas tecnologías, aprovechando tales beneficios y permitiéndoles maximizar la utilidad de sus grabaciones al ofrecer más información sobre un mismo escenario.
Conteo de personas, gestión de aforos…
En el caso de las soluciones IP y enfocándonos al mundo del retail, se abre un gran abanico de nuevas posibilidades gracias al uso de analíticas y sistemas dedicados a este mercado. Cámaras que permiten conteo de personas y gestión de aforos, estudio de zonas calientes basadas en el tránsito de personas, cámaras ocultas para zonas críticas o visión en 360º para zonas abiertas, son tan solo algunas de las múltiples posibilidades para incrementar la eficiencia y productividad en todo tipo de establecimientos comerciales.
Adicionalmente otra ventaja de las nuevas tecnologías es la integración de las cajas (TPV o POS) en el sistema de videovigilancia, permitiéndonos no tan solo sobre-impresionar los tickets en tiempo real sobre la imagen sino ofreciendo a posteriori estadísticas de consumo, ítems más/menos vendidos, ventas por empleado o caja, situaciones anormales como ventas por encima/debajo de ciertos valores, ventas fuera de horario comercial, devoluciones, y un amplio conjunto de situaciones anormales para su revisión, así como permitiendo todo tipo de búsquedas según múltiples parámetros.
A todo esto no debemos olvidar el objetivo principal de todo sistema de videovigilancia, la seguridad en todo momento y lugar de toda persona bajo su área de influencia, y para ello es imprescindible contar con equipos dedicados a las múltiples situaciones que se pueden dar en todo establecimiento:
Condiciones de baja luminosidad, ya sea en almacenes, estancias interiores o zonas oscuras, grandes contraluces en ventanales y accesos, espacios abiertos como aparcamientos y zonas comunes o zonas críticas como la zona de cajas y zonas con gran afluencia de clientes.
Sistema de visualización y grabación portátil (PVR)
Otra consideración para aquellos establecimientos especialmente grandes, donde frecuentemente encontramos servicios de vigilancia física, sería el dotar a tales empleados con un sistema de visualización y grabación portátil (PVR), que permita moverse por el establecimiento, grabar cualquier incidencia, comunicarse con otros compañeros y enviar en tiempo real la información a un centro de control.
Por último para poder gestionar todas las soluciones involucradas en la vigilancia de los establecimientos, ya sea a nivel local o en remoto desde centros de control, permitiendo así gestionar y supervisar diferentes centros de manera unificada se requiere de un software de control. Este debe permitir no tan solo visualizar en directo o reproducir grabaciones almacenadas, sino también gestionar y generar todos los informes que pueden ser obtenidos de los diferentes equipos instalados, y permitirnos de modo intuitivo y fácil de analizar, obtener y evaluar los resultados de los mismos. Permitiendo así conocer qué establecimientos reciben más visitas, generan más negocio o tienen una mayor cantidad de hurtos.
Francisco Garrido. Key Account Manager. Hikvision Spain