Cuatro Vientos, La Peseta, Valdefuentes, Valdelatas, Arroyo del Fresno y Las Tablas. Estos barrios ubicados en los distritos de Latina, Hortaleza y Fuencarral son los más propensos a presenciar robos en casas aseguradas según el informe «Los robos en viviendas madrileñas» recién elaborado por UNESPA.
La Asociación Empresarial del Seguro ha estudiado la distribución, la gravedad, el coste y la estacionalidad de 11.772 robos producidos sobre un parque de un millón de hogares repartidos por toda la Comunidad de Madrid. Esta información fue recopilada en el marco de un trabajo de investigación sobre el seguro de multirriesgos para el conjunto de España aparecido en la Memoria social del seguro 2015, recientemente publicada. Los datos recabados toman como punto de partida el código postal.
En las zonas más problemáticas de la capital es entre tres y cuatro veces más probable que una vivienda sufra un incidente que en el conjunto de Madrid. Al frente de la clasificación se sitúan los barrios de Cuatro Vientos y La Peseta, donde es un 311% más probable padecer una visita de los ladrones en casa. Le sigue Valdefuentes (+245%) (barrio que engloba Las Cárcavas, Sanchinarro y buena parte de Valdebebas) y la zona de Valdelatas y Arroyo del Fresno (+197%).
La marca que dejan los robos en hogares cambia si en lugar de medir la frecuencia se centra la atención en la gravedad de los incidentes. El estudio define como “gravedad” la relación existente entre el coste del robo y el valor de los bienes asegurados que había en la vivienda. Bajo este prisma, los incidentes más serios se producen en Los Cármenes y Aluche, en Latina. En esos barrios los ladrones perpetran delitos que son un 224% más graves que en el conjunto de Madrid. Detrás aparecen varios barrios ubicados en el distrito de Ciudad Lineal, como son Ventas y Pueblo Nuevo (+220%), así como Quintana y Concepción (+131%).
Un vistazo al coste en términos totales de los siniestros arroja un panorama completamente distinto al análisis en base a la gravedad. La mediana de coste de los robos es más elevada en la zona de Ciudad Universitaria. Un siniestro típico en esa parte del distrito de Moncloa asciende a 1.085 euros. La lista la continúan El Pardo, en el distrito de Fuencarral, con 620 euros; y los barrios de Hispanoamérica y Nueva España, en Chamartín, con 603 euros. Como referencia, el robo mediano en la ciudad de Madrid asciende a 365 euros. Es importante destacar que la mediana de coste es aquel dato que deja tantos siniestros por un lado (robos más caros) como por otro (robos más baratos). Por lo tanto, se puede considerar como un siniestro típico o probable.
Los robos en los hogares madrileños evidencia el importantísimo peso que tiene la ciudad de Madrid en el conjunto de la comunidad autónoma. La capital abarca un 52% de los robos. Le siguen en importancia varias localidades ubicadas en sus inmediaciones como son Getafe, San Sebastián de los Reyes, Alcobendas, Móstoles, Alcalá de Henares, Fuenlabrada, Leganés y Alcorcón. Cada uno de estos ocho municipios próximos a Madrid reúne entre un 2% y un 3% de los percances y, juntos, suman un 20% de los siniestros. Por lo tanto, se puede afirmar que siete de cada 10 robos en viviendas que se producen en la Comunidad Madrid, ocurren en la capital y su corona metropolitana.
Un análisis de la probabilidad de los robos por municipios en la región deja constancia, no obstante, de que la capital no es la población más problemática. Si los incidentes se miden en relación con el parque de viviendas aseguradas en cada localidad, se percibe cómo los más propensos a presenciar robos son los municipios medianos. A la cabeza de la lista se sitúa Rivas-Vaciamadrid. Ahí es 128% más probable sufrir un robo en casa que en el resto de la Comunidad de Madrid. Justo detrás aparecen El Boalo (+114%), San Sebastián de los Reyes (+112%) y Alcobendas (106%).
Entre tanto, las localidades más seguras de la región son Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago, en plena Sierra de Guadarrama. Ahí es un 92% menos probable que una vivienda padezca un incidente que en el conjunto de la región. Le siguen San Martín de Valdeiglesias (-74%), San Agustín de Guadalix (-66%) y Humanes (-59%).
Respecto a las épocas del año en que se producen más robos, los datos recabados por UNESPA muestran cómo los meses más problemáticos en la Comunidad de Madrid son diciembre y octubre. No hay, por tanto, cadencia estival alguna en la región. La estacionalidad de los robos en la ciudad de Madrid sí obedece, en contraste, al patrón clásico que vincula la época de robos con los periodos vacacionales. Los meses con más incidentes en la capital son diciembre y agosto, ambos de marcado talante de descanso, así como mayo y octubre, periodos estos últimos que albergan conocidas festividades madrileñas y nacionales que, a menudo, dan lugar a puentes y a las consiguientes escapadas fuera de la capital.